¿Sabías que en Nueva York hubo un torero? Sí lo hubo. Se trató de Sidney Franklin, nacido en Brooklyn (NY) en 1903. Hijo de inmigrantes rusos, judíos ortodoxos tuvo una buena condición económica a sus disposición teniendo accesibilidad a cursar estudios en la Universidad de Columbia.
A la edad de 19 años (1922) tras una discusión doméstica con su padre decidió abandonar su casa y escogió México como destino, donde quiso estudiar el arte de las culturas precolombinas. Afincado en Veracruz, fue en esta ciudad mexicana donde presencio por vez primera en su vida una corrida de toros de manos del gran diestro mexicano Rodolfo Gaona.
Tal fue su fascinación que decidió inmiscuirse de lleno en el arte del toreo, fue el 23 de septiembre de 1923 cuando vistió por primera vez un vestido de torear, lo que le llevaría a cursar una carrera como novillero por Panamá, Colombia, Portugal y España con el apode de «EL YANKI».
Debutó vestido de luces en México, en la plaza El Toreo de la Condesa, el 27 de julio de 1924, alternando con Porfirio Magaña, Manuel Rodríguez Pepete y Gabino Paredes, con novillos de Cazadero. Se presentó en Sevilla el 9 de junio de 1929, alternando con Camará II y Reina Echevarría con novillos de José Rufino Moreno Santamaría. En esa mimsa temporada protagonizó gesto curioso: la tarde del 21 de julio toreó un noveno toro en la Corrida de la Prensa en el donostiarra coso del El Chofre. En Madrid se presentó como novillero el 25 de julio del mismo año 1929, alternando con Maera II y Manolo Agüero, con novillos de Eduardo Pagés. Volvió a torear en Madrid la tarde del 15 de agosto, para lidiar novillos de Coquilla, alternando con Joselito Tomero y Alberto Balderas.
Tomo la alternativa, ya como Matador de Toros el 22 de febrero de 1931 en la localidad mexicana de Nuevo Laredo, con toros de Xajay, siendo su padrino Marcial Lalanda. Para confirmar alternativa en Madrid el 18 de julio de 1945, su padrino de confrimación Luis Gómez “El Estudiante”, testigo Emiliano de la Casa “Morenito de Talavera” y Alvaro Domecq, con el toro “Talle Alto”, de Sanchez Fabrés.
Fue íntimo amigo de Ernest Hemingway, con quien ejerció como corresponsal durante la Guerra Civil española. En 1932 salto al albero del cine, rodando junto al afamado actor James Deam, gran aficionado al arte taurómaco, la película «El Niño de España».
En los años 50 se afinco en Sevilla, donde incluso abrió su propia Escuela Taurina. Tras pasar 9 meses en una prisión sevillana, según cree su biógrafo Bart Coer, por homosexual, decidió regresar a Estados Unidos y asentare en Texas.vo lugar en Ciudad Juárez, México, en 1959, a partir de entonces se dedicó al periodismo taurino.
Falleció en abril de 1976 a la edad de 72 en Village, Nueva York.
Por Imanol Sánchez